El deporte del tenis tiene múltiples beneficios para la salud tanto físicos y psicológicos como sociales.
Un niño que comienza a jugar tenis desarrolla una buena autoestima, aprende a manejar la presión, desarrolla su habilidad estratégica y se encuentra más consciente de su entorno.
Pero no todo termina ahí. Jugar tenis tiene beneficios a nivel físico, mental y social:
1. Fuerza ósea
Jugar tenis fortalece los huesos de los niños y adolescentes, además de ayudar a prevenir la osteoporosis.
2. Coordinación motriz
Los niños que juegan tenis agudizan su coordinación dinámica general al involucrar a todo el cuerpo, así como su coordinación óculo-segmentaria, pues logra percibir el vínculo entre el campo visual y la motricidad fina de los brazos y manos.
3. Ejercicio aeróbico, cardiovascular y velocidad
Sin darse cuenta, los niños corren durante un buen rato mientras mantienen un alto nivel de energía. Esto desarrolla su velocidad, fortalece su corazón y los ayuda a descansar por la noche.
4. Flexibilidad
Los niños no solo aprenderán a tener la buena costumbre de estirarse antes y después de estar activos, sino que se estirarán y maniobrarán constantemente para atrapar la pelota, mejorando drásticamente su flexibilidad.
5. Equilibrio
Aprender a servir y el ritmo constante correr-detener-correr aumenta el equilibrio.
Y para reforzar la afición y el interés por este deporte nada como valorar sus logros con nuestros trofeos.